Muselinas y sonajeros

Los usos de las muselinas para bebé van a variar según su tamaño, pero todas cuentan con ciertos usos básicos que se le pueden dar por las características de sus materiales:

En caso de no tener un babero a mano, una muselina se puede doblar y usar como babero temporal. Además, también puede usarse para la limpieza del bebe, como para limpiar su boca del bebé después de alimentarlo y para limpiar pequeños derrames o desórdenes.
Si eres madre y quieres sentirte más cómoda amamantando en público, las muselinas se pueden utilizar para cubrir al bebé mientras es alimentado, proporcionando privacidad tanto para la madre como para el bebé.
También se utilizan para proteger al bebé del sol, el viento o los insectos cuando se encuentra en el cochecito o la cuna. Aunque es una tela fina, es bastante resistente y con capacidad de transpiración, por lo que el bebe no se sentirá asfixiado.
Por su misma capacidad de absorción, las muselinas son útiles como toallas para secar al bebé después del baño. También es común llevar una muselina en la pañalera como respaldo en caso de necesitar una superficie limpia para cambiar al bebé.
Algunos padres y cuidadores utilizan muselinas como juguetes sensoriales para bebés debido a su textura suave y maleable. Por lo que sí buscas una forma de mantenerlo entretenido, las muselinas también son una buena opción.
Aunque ya existen los doudous, los cuales cumplen con esta función de apego, las muselinas también son una alternativa a estas mantitas, por lo que te permitirán mantener tranquilo al bebe y lograr que este se sienta seguro.